Nuevamente el Aeropuerto de Palmerola sufre las consecuencias de la mala planificación en su construcción, al ser víctima de la lluvia que inundó los pasillos de la terminal aérea.
La lluvia afectó los negocios, los pasillos, el equipo eléctrico de las agencias de viaje y deja al descubierto la mala inversión que se hizo en su construcción en cuanto a los fenómenos climáticos.
Ya es la segunda vez que se inunda de agua la terminal y a vista y paciencia de las autoridades que poco o nada hacen pasa solucionar el problema. La solución pasa por una y más reuniones y de ellas, poca es la acción de las autoridades encargadas de administrar la terminal aérea del centro del país.
Las autoridades gubernamentales deberían de formar un equipo técnico especializado con experiencia internacional, que haga las evaluaciones sobre las inversiones en el aeropuerto de Palmerola para que se solucione el problema y se persiga a los culpables de la planificación y diseño de la estructura que más que beneficios, dejará sin ganancia a los inversionistas, en otro acto de corrupción que deben estudiar e investigar el Ministerio Público y el Consejo Nacional Anticorrupción.
Si así piensan atraer la inversión, en el mal estado en que se encuentra el Aeropuerto de Palmerola, es más fácil ahuyentarla del país.