La Comisión Parlamentaria para Revisión de los Productos de la Canasta Básica del Congreso Nacional (CN), se reunión con asociaciones de consumidores para hacerle frente a los altos precios de productos de primera necesidad.

Entre las organizaciones llamadas al diálogo están: la Coordinadora de Consumidores y Usuarios de Honduras (ACONSUMEH), el Comité para la Defensa del Consumidor Hondureño (CODECOH),  la Asociación para la Defensa de la Canasta Básica (ADECABAH) y otras organizaciones de consumidores, productores de los diferentes rubros, para encontrar hallazgos sobre los incrementos desproporcionados que se han registrado en los productos esenciales de la canasta básica.

La reunión estuvo integrada por los parlamentarios Rásel Antonio Tomé, Vicepresidente del Congreso Nacional, el Mario Segura, Rafael Sarmiento, Jari Dixon y Keyla Escalante.

La Comisión invitó a los representantes de los consumidores, para escuchar en base a sus experiencias, los impactos que han tenido los incrementos de los productos de la canasta básica, pese a la quinta rebaja a los precios de los combustibles, pero sin beneficios para los consumidores.

En ese sentido, el presidente de ACONSUMEH, Benjamín Zepeda, propuso siete puntos de ruta crítica, basada en una canasta básica científica, solidaria, a manera de encontrar los hallazgos e indicadores que establezcan la realidad de un clamor popular, sobre el alto costo de vida de los hondureños.

La metodología propuesta por ACONSUMEH, busca encontrar el epicentro del problema y no distribución de problemas, pues la línea de investigación va determinar los impactos y del por qué los productos no bajan de precio, señaló.

«En vista que los productores siempre han estado divorciados de los consumidores ACONSUMEH propone impulsar una economía a la agro industria, contratada, donde el productor con contrato en mano, produzca y sepa a cómo va a vender y cuánto va a ganar», destacó Zepeda.

Tanto ACONSUMEH como CODECOH, solicitaron a la Comisión, la restructuración del Instituto Hondureño de Mercadeo Agrícola (IHMA) y el la Suplidora Nacional de Productos Básicos (BANASUPRO), pues se determinó que dichas instituciones le compran a los productores y no reciben beneficios por su venta.

«El IHMA, durante los 12 años de dictadura, de cien por ciento de la producción de frijol, apenas compró un 10%, además que los silos que tienen en San Pedro Sula los tienen alquilados a la industria harinera», señaló.

La Comisión pidió el acompañamiento de consumidores y productores para hacer un recorrido a los mercados, con el fin de intercambiar un diálogo con los comerciantes, acción que por primera vez permitirá escuchara sobre los problemas del sector productivo del país.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *