Tegucigalpa, mayo de 2025. La preocupación surge en el contexto de la continuidad del Contrato de Exploración y Explotación de Petróleo en el Caribe hondureño, firmado en 2013 durante el gobierno de Porfirio Lobo Sosa, el cual sigue vigente bajo la administración de Xiomara Castro.

Uno de los mayores tesoros naturales en riesgo es el Sistema Arrecifal Mesoamericano, la segunda barrera de coral más grande del mundo, amenazada por los impactos de una posible extracción de petróleo y gas en el caribe hondureño y sus actividades relacionadas, como el transporte en buques cargueros, oleoductos, refinación, entre otros.

Ante esta situación, organizaciones sociales y ambientales nacionales e internacionales como ANAFAE, la Red Gran Caribe Libre de Fósiles, Oilwatch Latinoamérica, solicitan al Gobierno de Honduras, la realización de un estudio técnico independiente que permita evaluar los verdaderos impactos económicos, sociales y ambientales de estos proyectos, antes de avanzar en decisiones de alto riesgo.

El director de ANAFAE, Octavio Sánchez, señaló que los daños ambientales derivados de accidentes petroleros podrían ser irreversibles, afectando directamente la pesca artesanal, el turismo y los ecosistemas marinos que sostienen a más de 25,000 familias en los municipios costeros del Atlántico hondureño.

Sánchez recordó el reciente derrame ocurrido en marzo de 2025 en la provincia de Esmeraldas, Ecuador, donde la rotura de un oleoducto provocó la liberación de 25,000 barriles de petróleo, contaminando gravemente ríos y estuarios.

“Honduras debe aprender de las experiencias de otros países, donde la explotación petrolera no solo ha generado daños ambientales irreparables, sino también ha profundizado la dependencia económica y debilitado las estructuras democráticas”, afirmó.

Finalmente, hicieron un llamado a la ciudadanía a informarse y respaldar la solicitud del estudio técnico independiente como un paso fundamental para garantizar que las decisiones se tomen con información confiable, discusión pública amplia y respeto a los territorios y ecosistemas que hoy están en riesgo.

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